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Llaman a colectivo gay a unirse ante movilizaciones de grupos conservadores

*Dejar atrás diferencias, necesario para dar una respuesta coordinada, señala activista

*Organizan charla sobre familias homoparentales

México DF, agosto 4 de 2015 (Mario Alberto Reyes*).- Ante las marchas organizadas por grupos conservadores y religiosos que se oponen al matrimonio igualitario y su derecho a la adopción, el colectivo de la diversidad sexual debe dejar fuera sus diferencias para así armar una respuesta “lo más coordinada posible”, señaló Alonso Hernández Victoria, director de Archivos y Memorias Diversas.

El historiador subrayó que la legalidad derivada del Estado laico mexicano beneficia la lucha por los derechos de las personas no heterosexuales, sin embargo, advirtió que para presentar propuestas favorables, los activistas deben hacer a un lado las diferencias “tanto importantes como pueriles” para alcanzar sus objetivos.

Al concluir la charla “Familias homoparentales, ser papá sin morir en el intento”, realizada hace unos días en un bar de la Zona Rosa, y en la que algunos asistentes narraron su experiencia al conformar familias encabezadas por parejas del mismo sexo, Hernández Victoria subrayó la importancia de discutir el tema debido a que hasta antes de los avances registrados en los últimos años, los homosexuales carecieron de herramientas legales y judiciales para conformar núcleos familiares.

“Anteriormente, muchos gays formamos familias a través de otros lazos principalmente de solidaridad luego de ser desechados por nuestros parientes biológicos, ahora existen otras posibilidades, hay que conocerlas, saber a quién acudir y cómo actuar ante respuestas adversas de grupos religiosos. Debemos crear estrategias para apoyar a quienes desean adoptar hijos”.

Sobre la posibilidad de generar espacios de discusión fuera de la capital del país, el activista dijo que es necesario pues si bien en el Distrito Federal se han obtenido logros que lo convierten en una “isla de derechos”, de poco sirven cuando en el resto de la república el colectivo gay aún experimenta violaciones a sus derechos fundamentales.

En el conversatorio participaron Edgar Mendoza y Alfonso Macías, quienes compartieron su testimonio como padres gays. Ahí, Mendoza junto con su pareja Jesús Flores calificó como “maravillosa” su experiencia al adoptar a su hija seis meses después de nacida. Explicaron que ser padres fue un deseo siempre anhelado y este se cumplió gracias a que una pariente suya carecía de las herramientas necesarias para responsabilizarse de la niña.

La situación de Macías, en cambio, no ha sido fácil. En San Luis Potosí –región centro norte de México-, intentó adoptar a un par de niños. Siempre tuvo el deseo de ser padre, incluso antes de saberse gay.

Hace cinco años y como hombre soltero inició los trámites ante las autoridades estatales. Cada semana y durante cuatro años tuvo la oportunidad de convivir con los menores, juntos hacían diversas tareas y conversaban mucho.

Todo parecía marchar bien, le decían papá, la adopción parecía inminente. Sin embargo, una tarde, le informaron que las visitas se suspenderían pues se sospechaba que era homosexual. El argumento: “Los niños necesitan una mamá y un papá”. A pesar de todo, Macías no pierde la ilusión de algún día adoptar y formar una familia.

Durante la charla los participantes destacaron el derecho de la infancia en situación de vulnerabilidad a tener un lugar en el que se les quiera y proteja. “Si los grupos conservadores en verdad están preocupados por estos niños… ¿por qué no los han adoptado?”.

Exhortaron a los asistentes a terminar con la “autovictimización” y romper tabúes para fortalecer los cambios culturales y facilitar la integración social. Coincidieron en que en muchas ocasiones tener hijos fomenta el autocuidado y cambia la perspectiva de vida, por lo que ahora participan en organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos humanos.

La plática “Familias homoparentales, ser papá sin morir en el intento”, ocurrió en el marco de “El Taller de los Martes” que se realiza cada semana en punto de las 20:30 horas en el bar La Bella Epoque, ubicada en Estrasburgo 28 Zona Rosa.

*Periodista
Twitter: @mariobetorey
Fuente: AM Comunicación e Información (AMCeI)

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